Tras dos semanas intensas de competición paramos a tomar aire. Tenemos un poquito de tiempo para reflexionar, mirar atrás y ver qué ha sido esta fase de grupos de la Euro. ¡Qué competición! La echábamos de menos tras ese Frankestein con Covid de 2021.
Dos nombres nos han hecho morir del aburrimiento, Didier Deschamps y Gareth Southgate. ¿Es posible jugar peor fútbol con la cantidad de talento que tienen en sus filas? Complicado. Pero no se dejen engañar, siguen siendo favoritos al título.
El talento en el campo lo es todo. Sí, hay entrenadores que elevan ese talento al máximo o que incluso a jugadores medianos los convierten en estrellas. De esos no son ni Didier ni Gareth. Ellos se dedican a desaprovecharlo. Pero, son tan buenos sus jugadores que ganan. Cuando tú tienes a Foden, Mbappé, Griezmann o Kane, algo harás.
En contraposición a estos gigantes, tenemos dos naciones pequeñas, de las más pequeñas en Europa, que se han colado en la fase del KO por méritos propios. Georgia y Eslovenia apenas suman 5 millones de habitantes entre ambas, pero han sentido el aliento de todos. Ahora, toca lo más difícil.
Eslovenia está viviendo una edad dorada en el deporte. El baloncesto y el ciclismo copan los éxitos con Doncic, Roglic o Pogacar. Y ahora, le ha tocado el turno al fútbol. Con Oblak guardando sus esperanzas, con Sesko de ariete, y Bijol de centinela. Enfrente, Ronaldo y una Portugal con dudas. ¿Quién sabe?
Los georgianos, últimos verdugos de los lusos, son la única debutante que ha pasado a la fase eliminatoria en esta edición. De la mano del máximo goleador del torneo Mikautadze, Kvara y sobre todo, la espectacularidad en el arco de Mamardashvili, esperan poner en problemas a España.
Algo que se antoja difícil debido al historial entre ambas selecciones – en la fase de clasificación La Roja le endosó 10 goles en dos partidos – y al nivel que ha mostrado la selección de Luis De La Fuente en esta Euro. Y es que España es optimista. Y claro que podemos serlo.
El único equipo que ha ganado los tres partidos. Dos de ellos a selecciones potentes como la actual campeona, Italia, y Croacia. Ningún gol recibido. Buen fútbol, claro y directo. Nico y Lamine. Cucurella, Rodri, Fabián – que si se llamase Fabinho, pues sería el ex del Liverpool -, calla, calla, que nos emocionamos. ¿De más?
Pues seguramente. Seguramente nos pasemos. Seamos unos exagerados, nos dejemos llevar por las emociones, la alegría, el verano, la Euro, nos gusta hasta la segunda equipación. Hay que disfrutarlo, porque en cuartos se vislumbra Alemania. Ya seremos pesimistas para ese entonces. No os preocupéis.